Historia de la Bachata Dominicana
La bachata es un género de música y baile que se originó en la República Dominicana a principios del siglo XX. La música se caracteriza por sus ritmos lentos y románticos, y sus letras a menudo cuentan historias de desamor, amor y romance.
La música de bachata suele presentar un pequeño conjunto de instrumentos, que incluye la guitarra, el bajo, los bongos y la güira (un raspador de metal). La guitarra suele tocar la melodía principal mientras que los bongos y la güira proporcionan ritmo y percusión. En los últimos años, también se han añadido instrumentos electrónicos como teclados y sintetizadores.
En cuanto al baile, la bachata es un baile sensual e íntimo que a menudo se realiza en parejas. Implica mucho movimiento de cadera y cuerpo, y los bailarines a menudo usan abrazos cercanos y pasos sincopados para igualar el ritmo de la música.
La bachata se ha vuelto cada vez más popular en todo el mundo en los últimos años, y muchos artistas de diferentes países han incorporado elementos del género en su propia música. Aquí hay una lista de artistas importantes de Bachata:
- José Manuel Calderón
- Rafael Encarnación
- Luis Segura
- Leonardo Paniagua
- Luis Vargas
- Anthony Santos
- Raulin Rodriguez
- Joe Veras
- Juan bautista
- Juan Luis Guerra
- Aventura y Romeo Santos
Origen histórico de la Bachata Dominicana
La Bachata dominicana es el resultado de una fusión músico-social, la cual mezcal ritmos instrumentosu y melodías.
Etimológicamente, la palabra bachata, cuyo origen se presume africano, designa fiesta, jolgorio y reunión animada entre amigos; en un principio, incluso en República Dominicana el término bachata se utilizó para referirse a festividades o reuniones populares de carácter abierto y bullicioso, y no propiamente a un género musical.
La bachata es un género musical híbrido. Se considera al bolero rítmico, el son cubano, el merengue y el cha cha cha, entre otros, como sus más componentesrepresentativos. Muchos historiadores coinciden en que el origen de la bachata se sitúa a comienzos de los años 1920, aunque en sus primeras expresiones este género parecería distar mucho de la bachata actual.
La difusión de la bachata tuvo en sus orígenes una progresión lenta, y fue en los sectores marginales de República Dominicana donde tuvo una aceptación inicial, considerada por la alcurnia criolla como una manifestación rústica y ordinaria, a la cual le otorgaron títulos de carácter despectivo y peyorativo como “música de amargue” o “música de guardia”.
Para 1930, la bachata trascendía de los sectores marginales a sitios públicos representativos, tal es el caso del Callejón de la Alegría, en el que ya se reconocían como bachateros a artistas tales como Ramón Wagner y al Conjunto de la Mulatería.
Ya en 1955, se hacía por parte de Ramón Emilio Jiménez la primera distinción específica de la consistencia del género como tal, y se enfatizaba como una celebración en la que se reconocían ritmos generados por la inclusión de instrumentos como la guitarra, el bongó, y las cucharas. En estas manifestaciones se entonaban variaciones de géneros musicales como el bolero rítmico, la guaracha, y el son. Con la llegada de la década de los sesenta la bachata migró de un entorno rural a uno urbano, y fue reconocida como un género musical de características bien definidas, de origen dominicano e influenciado claramente por el bolero.
A la primera generación de bachateros pertenecen artistas de la talla de Rafael Encarnación, José Manuel Calderón y Luis Segura, estos últimos han sido considerados como los bachateros más representativos de su época, y algunos críticos aseguran que son los padres de la Bachata, al considerar que los ritmos que se entonaban hasta su aparición bien podrían ser reconocidos como boleros acelerados.
Los finales de la década de los setentas y la década de los ochenta fueron un punto de inflexión en la historia de la bachata, tanto por la popularidad y aceptación que alcanzaron éxitos como “Chiquitita” (Leonardo Paniagua) y “pena por ti” (Luis Segura), como por la aparición de una nueva generación de artistas, a lo que se sumaba el surgimiento de nuevas formas digitales de grabación musical. Entre los artistas más representativos de esta época podemos mencionar a Blas Durán, Marino Pérez, Juan Luis Guerra, Víctor Víctor, Luis Días, Sonia Silvestre, entre otros, quienes lograron que este género no solo fuera escuchado en sectores populares, y se masificara a tal punto de trascender los límites dominicanos y convertirse en una referencia musical latinoamericana.
La bachata de hoy en día es un producto musical no solo dominicano, sino latinoamericano que ha logrado ganar adeptos de todos los niveles sociales en América, Europa, Asia, así como entre los amantes de la música latina de todo el mundo. De hecho, existen representantes del género que no provienen de origen dominicano que gozan de gran aceptación.
Importancia cultural de la Bachata para la comunidad
Siendo una de las manifestaciones artísticas autóctonas de mayor popularidad, difusión y alcance, la Bachata constituye un poderoso elemento de cohesión social y ha servido como un dispositivo para la interacción transversal entre los diferentes estratos y generaciones que componen la sociedad dominicana. Además, el elemento permite que los diferentes segmentos sociales aprecien la realidad cultural que los rodea, y ofrece un retrato preciso del tiempo y la sociedad que lo produjo.
El elemento es una parte esencial de las celebraciones y, su música, canción y danza generan una notoria alegría y felicidad, haciendo que la vida cotidiana y la rutina existencial sea más tolerable, por lo tanto, desempeña un papel vital en el proceso de socialización de la cultura.
Asimismo, el elemento es un instrumento para la difusión de ideas, que funciona internamente como herramienta de promoción política y comercial, mientras que, en el exterior, es sin dudas la expresión cultural nativa de mayor penetración, propagación y trascendencia, fomentando efectivamente el diálogo intercultural mientras se cimienta como un componente incuestionable de la identidad del pueblo dominicano.
Además, la música, el baile y la letra de la bachata son un claro reflejo del espíritu apasionado, romántico, sentimental, jovial y abierto que caracteriza a los dominicanos.
Al igual que otras expresiones culturales similares, la música y la danza de Bachata generan un sentido de comunidad. Es un eco de la historia y las raíces de la gente, y es un pilar clave de la identidad de la nación. Vale destacar que, como una danza de parejas, la dinámica de la Bachata implica una interacción de género permanente, y es igualmente disfrutada por adultos y menores. Al igual que el merengue dominicano, la danza de la Bachata es un sutil pero poderoso canal de comunicación no verbal entre individuos en un entorno social.
El baile es una parte vital del estilo de vida dominicano, y está demostrado que fomenta las relaciones de amistad entre personas de amplios rangos de edad y de diferentes orígenes raciales, culturales y ocupacionales.
Los Artistas Importantes de La Bachata
Los portadores y practicantes de la Bachata provienen de todos los sectores de la sociedad dominicana, sin distinción de edad o género. Del mismo modo, casi todos los países del mundo poseen grupos organizados de practicantes y aficionados al baile. A nivel mundial hay un número significativo de estudios, academias y establecimientos dedicados a la enseñanza metódica de la danza de la Bachata.
A principios de los años sesenta, hubo un proceso de apertura de la sociedad dominicana, y es precisamente en este período cuando esta manifestación popular comenzó a extenderse de manera activa y masiva, especialmente a través de la radio. Es preciso reconocer la estrecha vinculación de la emisora dominicana “Radio Guarachita” en este proceso de difusión, ya que en esta época fue la única emisora que asumió el rol de promover la Bachata a nivel nacional.
Actualmente, en la parte musical del elemento, los portadores son intérpretes y compositores de renombre, cuyo extraordinario talento y manifiesta vocación pedagógica han servido como inspiración y guía para las nuevas generaciones.
Entre los precursores portadores del ritmo podemos mencionar a José Manuel Calderón y Rafael Encarnación.
La bachata nace en Santo Domingo de Guzmán, Capital de la República Dominicana un día 30 de mayo del año 1962. Se grabó inicialmente en los estudios de “La Voz del Trópico”, una emisora radial ubicada en la calle Abreu del sector San Carlos. Usando los valiosos servicios de mi gran amigo Fabio Inoa como ingeniero de sonido y grabación quien trabajaba en la elaboración de cuña y acetato de dicha emisora.
Ahí comenzó esta linda historia con dos canciones que yo escogí para que se iniciara este fenómeno musical que hoy se denomina bachata anteriormente conocida como “música de guardia”.
La primera que yo grabé se titula condena (qué será de mi) de la pluma de Bienvenido Fabián, acompañado por el Trío Los Juveniles que componíamos Andrés Rodríguez (requinto), Luís Pimentel (segunda guitarra) y Yo en la tercera.
- Jose Manuel Calderon
Despues de Calderon y Encarnacion, llegan los nombres que hoy reconocemos como los primeros precursores que comienzan a hacer de la bachata un sonido popular y buscado. Estos artistas incluyen: Luis Segura, Leonardo Paniagua y Blas Duran, cuyas contribuciones marcaron el fin del aislamiento de la bachata y su entrada a la corriente principal.
A principios de la década de 1980 llega un artista cuyo legado ayudaría a convertir la bachata en el éxito internacional que es hoy. Ese artista es por supuesto Luis Vargas, conocido como El Rey Supremo.
En 1983, Vargas lanza su primer disco "El Debate: Merengues de Verdad", y se embarca en una carrera en la que lanza más de 20 discos y se convierte en un éxito internacional y uno de los artistas de bachata más respetados.
Luis Vargas nació el 23 de mayo de 1961 (61 años) Bandera de la República Dominicana Santa María, Montecristi, República Dominicana. Su repertorio musical incluye muchas grandes canciones que ven una rotación constante en la radio y de Djs.
Pero Luis Vargas es solo el primero de tres artistas provenientes de Monte Cristi que cambiarían la bachata para siempre.
La segunda, y probablemente la voz más famosa e importante de la bachata, es Antony Santos, conocido como El Mayimbe. Santos comenzó como guirista de Luis Vargas, pero se aventuraría por su cuenta a principios de los 90, para convertirse en el bachatero de la lista de reproducción de todos.
Después de Antony Santos, otro artista de Montecristi comenzó como guitarrista de Antony Santos, y luego se convertiría en lo que muchos consideran el segundo nombre más importante en la bachata. Ese artista es Raulin Rodriguez, cuyo estilo y canción titular Nereida es una de las favoritas de la multitud.
Muchos otros nombres importantes dejaron su huella a mediados y finales de la década de 1990, cuyas contribuciones a la bachata los han convertido en artistas con una huella en la historia. Estos artistas incluyen; Joe Veras, Frank reyes, Zacarias Ferreira, Ramón Torres, Juan Bautista y muchos más.
Finalmente, en una cuarta etapa, llega la Bachata-pop, donde se destacan representantes de la dimensión del Grupo Aventura, Romeo Santos, Monchy y Alexandra, Prince Royce, etc. Este estilo de bachata adopta una naturaleza más pop. Centrándose más en la exhibición y en la multitud más joven de la generación z. Estos artistas rompe las puertas para que la bachata se convierta en un fenómeno verdaderamente global.